Si nos permitimos el lujo de generalizar según observamos la fotografía compartida, ponerse al mismo nivel que nuestro interlocutor es algo innato: vemos como Tris se agacha para transmitir un mensaje a la misma altura que Gus para que lo comprenda de la mejor manera posible. Esto es lo normal y lo común. Y por eso pienso que, cuando algunos se expresan conscientemente a otro nivel, importándoles más el hablar que el ser entendidos, no dejan de ser humanos, pero sí que pierden algo de su humanidad. Os deseo que tengáis buen día, para lo cual comunicarse empáticamente siempre será de gran ayuda.